Page 13 - Revista 139 Diciembre 2018

Delegación de Santander

Tras el descanso, fuimos a ver el espectáculo de las águilas que fue a las 12.00 y duró algo más de media hora,
al terminar esto, fuimos a un parque donde había mesas de picnic donde comimos todos juntos.
En el teleférico
Volvimos al autobús que nos llevó hacia el recinto de los elefantes donde cogimos el teleférico. Este hizo dos
paradas, la primera subía a un mirador, llamado ¨el mirador de los osos¨ desde donde se veía todo Santander, la
bahía, Astillero, Camargo, el puerto, el centro Botín,…
La siguiente parada nos dejó en otro mirador desde donde se veían todos los pueblecitos de alrededor del par-
que, Saron, Obregón, Villanueva,… Terminamos sobre las 3 de la tarde y volvimos al autobús.
Continuamos la excursión viendo más animales, vimos las gacelas que estaban sueltas y pasaban por la carre-
tera, avestruces, rinocerontes, jirafas, ñus, lobos, panteras,…
Sobre las 16.30 hicimos otro descanso para tomar un café o un refresco, y vimos la zona de las serpientes.
Leones marinos
A las 5.00 empezó el espectáculo de los leones marinos. Durante este espectáculo cogieron a una señora volun-
taria de entre los espectadores y el león marino la llevo una flor. También bailaban, saltaban entre aros, aplau-
dían, comían calamares, sardinas, arenques, …
A las 17.45 aproximadamente cogimos el autobús y volvimos para Santander.
Terminamos agotados de tanto mirar hacia los lados y subir y bajar del autobús. Nos reímos un montón con Ve-
rónica, nuestra trabajadora social que nos subía y bajaba del teleférico a empujones porque la cabina no paraba
y había que hacerlo en marcha.

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