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Delegación de Santander

De ruta por el Camino de Santiago

El Camino de Santiago también pasa por Santander, donde los peregrinos pernoctaban en su ruta hacia Galicia.
Y el trayecto que todos realizaban es el que se propusieron descubrir cinco de las personas que acuden diaria-
mente a la delegación de Fundación AFIM en Santander.
El pasado 15 de noviembre, el grupo quedó en la Catedral con los voluntarios del Ayuntamiento que iban expli-
car el recorrido. Y comenzaron en el mismo claustro de la Catedral. “Nos comentaron curiosidades del edificio
del patio, los arboles (naranjos y cipreses) y nos enseñaron una maqueta de la ciudad de Santander en el siglo
XIV, que era completamente diferente a la ciudad que hoy conocemos”, comenta Patricia Villegas, monitora de
talleres de la Fundación. La ciudad tenía su muralla, un castillo, el río que la atravesaba. El mar entraba mucho
más en la ciudad de lo que lo hace actualmente.
“En aquella época, la catedral era un hospital y era donde daban cobijo y alimentos a los peregrinos a su paso
por Santander. También nos enseñaron la puerta del perdón y nos comentaron que antiguamente en esa zona se
hacia el mercado de la Puebla vieja”. Posteriormente atravesaron lo que antes era un puente para encaminarse a
la Puebla nueva, hasta la Iglesia de la Asunción. Como curiosidad, los voluntarios comentaron que una calle pa-
ralela se llamaba antiguamente Calle de la Sal, “hoy conocida como Ruasal, porque en aquel entonces allí estaba
la casa de la sal donde almacenaban la comida”.
Finalmente, bajaron al puerto para ver por dónde entraban los peregrinos que llegaban en barco.

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